Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y  Jornada de
Vocaciones Nativas

Deja tu huella, sé testigo

Para suscitar en todos los jóvenes la pregunta por su vocación; y para invitar a toda la comunidad cristiana a orar y acompañar las vocaciones que la Iglesia necesita en nuestro mundo.

La vida es un camino y todo camino tiene un inicio y un sentido, que tras un recorrido conducen a una meta. Así es nuestra vida: la iniciamos al nacer y buscamos darle un rumbo que, día a día, nos lleve a buen término. La vida es una peregrinación.

Ante la vida podemos tener dos actitudes: vegetar o caminar, ser espectador o protagonista. También hay muchas maneras de moverse en la vida: el “vagabundo” se mueve sin rumbo ni sentido, para sobrevivir; el “turista” tiene una meta, pero se queda en la superficie de las cosas y de las personas; el “peregrino” hace de su camino una búsqueda y una ofrenda.

Todo camino entraña riesgos y desafíos. Quien ha hecho una peregrinación, lo sabe. También en el camino de la vida y del seguimiento del Señor. Formar una familia, vivir el trabajo desde la entrega, consagrar la vida al Señor… Es necesario ir superando dificultades y retos para poder acercarse a la meta.

En Jesús encontramos el camino que nos conduce al Padre, y en Él descubrimos lo que significa acoger el Reino. Esa es la huella que nos dejó, y que permanece viva por los siglos.

Esta es su llamada: “deja tu huella, sé testigo”¿Podrá contar contigo?

Y a ti… ¿Quién te ha dejado huella?
Y tú, ¿Qué huella puedes dejar?

Mensaje del Papa

“Queridos jóvenes, no vinimos a este mundo a “vegetar”, a pasarla cómodamente, a hacer de la vida un sofá que nos adormezca; al contrario, hemos venido a otra cosa, a dejar una huella (…). El tiempo que hoy estamos viviendo, no necesita jóvenes-sofá, sino jóvenes con zapatos; mejor aún, con los botines puestos. Solo acepta jugadores titulares en la cancha, no hay espacio para suplentes. El mundo de hoy les pide que sean protagonistas de la historia porque la vida es linda siempre y cuando queramos vivirla, siempre y cuando queramos dejar una huella”.

Papa Francisco

Deja tu huella, sé testigo.